HRW denuncia maltrato a migrantes en centros operados por el ICE en Florida

Funcionarios del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos "degradaron y deshumanizaron" repetidamente a migrantes detenidos en tres centros de la entidad federal ubicados en el estado de Florida (sureste), denunció este lunes la organización Human Rights Watch (HRW).
"Los detenidos en tres centros de Florida dijeron a Human Rights Watch que los funcionarios de detención del ICE y los guardias de contratistas privados los trataron de manera degradante y deshumanizadora", señaló la organización en un informe.
Los detenidos sufrieron varios tipos de abusos, entre ellos, estar esposados durante largos períodos en autobuses sin acceso a comida, agua o incluso baños funcionales, según el documento.
También fueron confinados en celdas de detención extremadamente frías, donde se vieron obligados a dormir sobre pisos de concreto helado, bajo iluminación fluorescente constante.
Según una detenida, ella y varias otras mujeres fueron colocadas en una celda usualmente utilizada para procedimientos de admisión de reclusos.
La mujer recordó que solo había un inodoro cubierto de excrementos y que los oficiales no les permitieron limpiarlo.
La organización también cita el caso de un hombre que comía con las manos encadenadas a la espalda.
"Teníamos que agacharnos y comer de las sillas con la boca, como perros", dice el detenido citado en el informe.
HRW exhortó al ICE, a sus contratistas y a los gobiernos locales, a que sólo recurran a la detención de migrantes como última opción, al tiempo que llamó a poner fin a la reclusión en régimen de aislamiento solitario y garantizar asistencia médica oportuna para quienes la necesiten.
También recomendó que los oficiales reciban capacitación en derechos humanos.
En el primer día de su segundo mandato como presidente de EEUU, Donald Trump prometió detener de inmediato la inmigración ilegal e iniciar deportaciones masivas.
Según la Casa Blanca, en los primeros seis meses de su presidencia, las autoridades arrestaron a más de 100 mil migrantes indocumentados y revocaron los permisos de residencia temporal a otros 500 mil extranjeros.