A países de Asia Central, Xi Jinping alerta sobre el riesgo de las “revoluciones de colores”

A países de Asia Central, Xi Jinping alerta sobre el riesgo de las “revoluciones de colores”

El pasado 19 de mayo, el Presidente Xi Jinping presidió la Cumbre China-Asia Central en el Centro Internacional de Conferencia de Xi’an de la Provincia de Shaanxi. En el discurso principal, el Presidente Xi Jinping propuso persistir en cuatro principios sobre la construcción de la comunidad de futuro compartido China-Asia Central, me referirá solo a tres de ellos. Y es que un tema vuelve a estar presente desde 2022 cuando ya entonces alertó a los líderes de esa misma región sobre la necesidad de establecer un frente para evitar que las potencias extranjeras instiguen "revoluciones de colores" en sus países, como uno de los mayores desafíos en materia de seguridad.

Y es que China desde el año pasado anunció la construcción conjunta de la comunidad de futuro compartido China-Asia Central, como una decisión histórica en el nuevo contexto actual para proteger los intereses fundamentales de los pueblos. En foros de gran relevancia, como la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS), otro importante bloque regional, el político chino ha insistido sobre la necesidad de estar alertar y unirse para evitar la intromisión extranjera, pues el gigante asiático no está exento de este riesgo.

Primero. Uno de los ejes es la asistencia mutua, donde los intereses vitales como la soberanía, la independencia, la dignidad nacional y el desarrollo a largo plazo, sean pilares para una establecer relaciones de confianza recíproca.

Segundo. Otro de los aspectos es el desarrollo compartido. Seguir levando la delantera en la cooperación de la construcción conjunta de la Franja y la Ruta, promover la implementación de la Iniciativa para el Desarrollo Global, liberar plenamente el potencial de cooperación en áreas tradicionales como la economía, el comercio, la capacidad productiva, la energía y el transporte, así como forjar nuevos puntos de crecimiento como las finanzas, la agricultura, el alivio de la pobreza, el desarrollo verde y bajo en carbono, los servicios médicos y sanitarios, innovación digital, con miras a construir juntos una comunidad de cooperación de ganancias compartidas y progreso común. 

Tercero. Llamó a los países de Asia Central a practicar juntos la Iniciativa para la Seguridad Global, rechazar categóricamente los intentos externos de interferir en los asuntos internos de los países de la región o instigar las “revoluciones de colores”, mantener la tolerancia cero a las tres fuerzas del terrorismo, el separatismo y el extremismo. También llamó a redoblar esfuerzos por solventar el dilema de la seguridad regional, con miras a construir juntos una comunidad libre de conflictos donde reine la paz duradera.

Este tercer aspecto, como alerta, es sumamente importante si se considera el convulso panorama internacional que prevalece, donde las revoluciones de colores se han convertido en un poderoso instrumento del imperialismo para socavar la independencia de los países y adueñarse de sus recursos o bien barrer a las élites para poner a nuevos títeres como ya ocurrió en Ucrania, para que obedezcan sus designios. Esto también es importante para los mexicanos si consideramos que cada vez es más agresivo y violento el discurso norteamericano de fragilidad institucional en México. Es por ello que considero muy relevante esta oportuna alerta del presidente Xi Jinping.

En AL, veamos ¿qué se juega en Ecuador?

En las elecciones de Ecuador de juega el titular del ejecutivo y los miembros del Parlamento. Las principales fuerzas contendientes representan, por un lado, la continuidad del gobierno neoliberal de Guillermo Lasso, que ha llevado al país a la delicada situación económica, social y de inseguridad insólitas, con el concerniente descontento social que ello genera, asegura el Latinoamericanista de la UNAM, Ehécatl Lázaro.

Por el otro, dice el analista, el grupo que representa el ex presidente Rafael Correa, el correísmo, que busca retomar el poder para enfilar a Ecuador hacia un proyecto post neoliberal que beneficie a las grandes mayorías ecuatorianas y a los pueblos originarios. Después de la traición de Lenin Moreno y del mal gobierno de Lasso, esta puede ser la oportunidad para que el correísmo retorne al poder. ¿será?