Países de América Latina reaccionan a los ataques de Israel contra Irán

Varios países de América Latina reaccionaron a los ataques de Israel contra Irán de este viernes, haciendo un llamado al diálogo.

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, llamó este viernes a promover la paz ante los ataques de Israel a Irán, y a manifestaciones pacíficas ante las protestas en EEUU contra las redadas de migrantes.

"Nosotros no podemos nunca estar de acuerdo con acciones violentas, nuestro movimiento siempre ha sido pacifico, y hay que promover siempre la paz. Aprovechando también el tema de Irán el día de ayer, México siempre va a promover la paz en el sentido amplio; y también, para que cualquier mexicano o mexicana, cuando se manifieste sea pacíficamente", dijo la jefa de Estado en conferencia de prensa.

"La República Bolivariana de Venezuela condena de forma categórica la agresión militar ilegítima, injustificada y violatoria del Derecho Internacional perpetrada por el Estado de Israel contra la República Islámica de Irán", escribió el canciller venezolano, Yván Gil, en su canal de Telegam.

Por su parte, el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, enfatizó que los ataques israelíes "elevan la tensión en Oriente Medio de manera irresponsable y ponen en peligro la paz y la seguridad internacional y regional con consecuencias imprevisibles".

"Hacemos un llamado a detener la barbarie y al respeto al Derecho Internacional", escribió el mandatario en su canal de Telegram.

En un comunicado oficial, el Gobierno de Nicaragua también condenó el ataque israelí contra Irán, señalando que "violenta todas las leyes y normas de la convivencia y Tratados Internacionales".

De la misma manera, la Secretaria de Relaciones Exteriores de México expresó su preocupación por los ataques y rechazó la escalada de violencia desatada en Medio Oriente.

"De conformidad con nuestros principios constitucionales de política exterior, la Secretaria de Relaciones Exteriores reitera la vocación pacifista de nuestro país, que privilegia el diálogo y la vía diplomática para la solución de controversias sobre las opciones militares", añadió el ente diplomático.

El Gobierno de Colombia también manifestó su preocupación por los recientes acontecimientos y por las posibles repercusiones que estos hechos puedan tener sobre la estabilidad de la región de Medio Oriente.

"El Gobierno colombiano hace un llamado a la moderación, al respeto de los canales diplomáticos y a la utilización de mecanismos multilaterales que contribuyan a prevenir una escalada del conflicto y permitan avanzar hacia una solución pacífica y duradera en la región", señala el comunicado de la Cancillería colombiana.

En la madrugada de este viernes, la Fuerza Aérea de Israel llevó a cabo varias oleadas de ataques en diversas partes de Irán, incluida Teherán, dirigidos contra instalaciones militares y de enriquecimiento de uranio.

Las autoridades israelíes afirmaron que la operación León Naciente tiene por objeto evitar una amenaza para la existencia del Estado judío, ya que, según informes militares y de inteligencia israelíes, Irán se ha acercado al "punto de no retorno" en el desarrollo de armas nucleares en un breve plazo de tiempo.

En los ataques fueron eliminados al menos 20 altos cargos militares iraníes y varios científicos nucleares, según medios internacionales y regionales.

El Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (CGRI) confirmó en particular las muertes de los generales de división Hosein Salami, comandante en jefe del CGRI; Mohammad Bagheri, jefe del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas; Gholam Ali Rashid, jefe del cuartel general de la base de defensa antiaérea Khatam al Anbiya; así como del general brigadier Amir Ali Hajizadeh, comandante de la Fuerza Aeroespacial del CGRI.

Los ataques alcanzaron también la instalación nuclear de Natanz, sede de los militares iraníes en el noroeste del país.

El líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jameneí, calificó de crimen los ataques israelíes contra Irán y dijo que a Israel le espera un "destino amargo y terrible".

Antes del inicio de la operación, las autoridades israelíes declararon el estado de emergencia en el país, cerraron el espacio aéreo, activaron un modo especial de funcionamiento de los hospitales y pidieron a la población que siguiera las instrucciones del servicio de defensa civil.